La espada de Damocles
La frase se refiere a Damocles, uno de los cortesanos mas aduladores de Dionisio de Siracusa, llamado el Tirano, que vivió en el siglo IV antes de Cristo. Como Damocles se pasaba el día alabando la felicidad de Dionisio, éste, para demostrar que no era tal, le invitó a asistir a un banquete en el que fue obsequiado como un príncipe. En lo mejor de la fiesta, levantó los ojos Damocles y vio que del techo colgaba una espada desnuda, sostenida solamente por una crin de caballo. Horrorizado del peligro en el que se encontraba, pidió permiso para retirarse, pero no lo hizo sin antes reconocer que la existencia del tirano no era tan feliz como parecía.
Este es un blog íntimo escrito desde el sentimiento, no sé si seré capaz de expresar lo que realmente siento pero, para mi, es importante expresarlo bien. Creo que mi etapa de “webmaster” ha acabado. Internet forma parte de mi vida desde hace décadas, una parte muy importante, pero ya no tengo el ánimo para seguir promocionando Internet del modo que lo he hecho hasta la fecha. Esta sensación no es fruto de una depresión pasajera ni de una calentura fruto de algo concreto, es un sentimiento que se ha arraigado en mi hace semanas y va creciendo a cada día que pasa. Creo que llegó el momento de decir “adiós” a lo virtual en el modo creativo que siempre me ha acompañado, cual fiel escudero.
Buf, ya te estás enrollando,… concreta Wogker!
Wogker e Internet son sinónimo de “Agujero Negro”. Desde mis principios en la Red sentí la necesidad de tener una página personal y agrupar allí los conocimientos adquiridos. La web fue creciendo entorno a la amistad y la ayuda, desde cero llegó a tener miles de visitas diarias y se formó una comunidad enorme con amigos de todo el mundo. Se me llenaba la boca afirmando que gracias al “agujero” Yo tenía cama en donde dormir en casi cualquier rincón del planeta. Era bien cierto! Se hicieron “kedadas” memorables en las que nos citamos amigos de España, Alemania, Uruguay, increíble. Fruto de ellas conocí a la madre de mi hijo y casi puedo decir que mi “wogkercito” nació en el Agujero.
Yo, aficionado a “aporrear el teclado” y muy dado a escribir “diarreas mentales” de todo tipo, empecé a escribir un boletín por e-Mail, el Burejo, que desde los diez lectores, todos amigos cercanos, alcanzó casi el medio millón de suscriptores. Hoy las listas siguen funcionando pero quizás los e-Mails activos no superen los 200.000. A la gente le gusta recibir mis panfletos (de masoquistas está el mundo lleno, je) y aún hoy lanzo un boletín de vez en cuando, sin agobiar demasiado. Nunca he recibido una crítica fuera de lugar por ello.
Todo iba a las mil maravillas hasta que, en el 2009, la SGAE lanzó una campaña de denuncias indiscriminadas contra los portales mas conocidos del momento, el Agujero entre ellos. Agua pasada no mueve molino y no me apetece nada recordar aquellos momentos pero fueron semanas horribles para un simple internauta que, sin ningún ánimo de lucro, mantenía una web por mera diversión. Al fin, el juez rechazó el cierre preliminar de la web y no dictó sentencia alguna en nuestra contra pero Yo me vi forzado a un acuerdo ante la imposibilidad de soportar los costes de un proceso que se adivinaba eterno y sangrante. El monstruo era demasiado grande para matarlo solo y cedí a retirar todos los contenidos P2P del Agujero Negro.
Esto, wogker, ¿realmente sabes lo que significa “concretar”?
Aquel episodio me derrumbó y abandoné por completo Internet durante cuatro años, del 2009 al 2012, una eternidad vista la velocidad a la que se mueve todo esto. En el 2013, olvidado ya el triste episodio de la SGAE (ejem!), y con un “mono” de proporciones considerables, decidí volver a poner en marcha el Agujero Negro. Creamos una nueva comunidad, intenté reciclarme técnicamente, asumir el entorno “social” que ahora nos rodea y volver a empezar. Llevo ahora casi dos años de “resurrección” pero, la verdad, las sensaciones nunca han sido las mismas que antaño.
Una espada de Damocles me acompaña siempre al navegar y me coarta a cada click, es una sensación agobiante que no logro evadir y que, poco a poco, se ha adueñado de mi ego virtual. Al fin, la satisfacción por lo publicado es cada vez menor y eso se transmite en mis escritos, sin duda alguna. Internet pierde interés para mi y, por ende, mis publicaciones para mis lectores. Además, mantener una página web en la actualidad implica tal número de requerimientos que es casi un milagro publicar algo de forma legal: que si las condiciones generales, que si el aviso legal, que si los datos de propiedad, que si las cookies, que si el registro legal de los usuarios, en fin, un “via crucis” solo al gusto de masoquistas como el que escribe. Vivo pendiente del correo, esperando ese mensaje del Ministerio del Interior reclamando vete Tu a saber que y, de regalo, multa al canto!
En la toma de esta decisión final, cerrar el Agujero Negro, me ha ayudado mucho la nueva Ley de la Propiedad Intelectual (LPI), y su canon para la AEDE, que entra en vigor el año que viene en España. Aún no puedo creer que se haya aprobado una ley que nos obliga a pagar por poner enlaces, algo que forma parte de la “netiquetta” y es parte de los cimientos de Internet. Pagar por enlazar es matar la poca libertad que le queda a la Internet española y mas si es en favor de una asociación que, en sus formas y maneras, a mi me recuerda mucho a la SGAE. Tras ambas se sitúa el gobierno de turno, siempre dispuesto a ceder en favor de los “lobbys”, siempre en contra de los ciudadanos como Tu y como Yo. Mierda de país! (perdón)
Se acabó, me libero de mis ataduras en pro de una Internet de calidad y me acomodaré en una nueva posición de internauta “pasivo” que nada aporta al entorno en el que se mueve. Me duele tomar esta decisión, especialmente por aquellos que han estado a mi lado en el Agujero Negro esta segunda temporada, pero no quiero seguir soportando esta presión ni quiero participar ya en una Internet que cada vez me resulta menos interesante, sin libertad, cada vez mas tele-dirigida por unos pocos. e-Adiós Agujero Negro!!!
Eres un pesao, ¿has acabado ya?
Casi. Para acabar, ronda de agradecimientos. Yo os considero, sin conocer a muchos personalmente, mis amigos virtuales y os siento muy cerca. El Wogker no desaparece de Internet pero sí deja de mantener esta página tan negruzca que tanto quiere. Gracias por soportarme durante todo este tiempo, andaré a este lado del monitor, vete Tu a saber en que nuevos líos virtuales. ¿Donde? Ahora no se responder a esa pregunta pero en mi correo e-Mail wogker@gmail.com tienes a un amigo. Graciassss!
Me alegra mucho que sigas por aquí, con espada de Damocles o sin ella. Será otra etapa en la que muchos te seguiremos.
Un brindis a tu salud 😉
Sono italiana e capisco abbastanza bene lo spagnolo. Tuttavia, non so se ho capito bene quello che sta succedendo…..
Spero di poter continuare a frequentare il vostro sito, in un modo o in un altro perchè mi piace molto !!
Auguri e DOVETE RESISTERE !!!! Lorenza desde Italia
Y si tu servidor o alojador web no fuera de España? La ley tambien se aplica la nueva Ley de la Propiedad Intelectual (LPI), y su canon para la AEDE?? hace la gran «Kim Dotcom» (creador de megaupload y ahora de mega) que saco sus servidores de EEUU por las leyes que tenían la SOPA la PIPA y esas cosas! y ahora abrio las cedes en Nueva Zelanda ya que las leyes de yankilandia no se aplican en ese pais jeje! 🙂 A no deacaer por culpa de terceras personas mala leche que no saben nada de nada solo estan atras de un escritorio buscando como meter el dedo en el «aujero» para molestar jajaja! Abrazos y gracias por todo!!
Un placer haber tenido tantos años de agujero.
Hasta siempre.